FRACCIONAMIENTO DEL IMPERIO CAROLINGIO
Apuntes tomados por Lourdes A.
Carlomagno |
El Imperio Carolingio a la muerte de Carlomagno se tambalea porque al igual que el Imperio de Nabucodonosor tenía los pies de barro:
Esos pies de barro se podrían materializar en primer lugar en una escasez de riquezas debido a la precaria explotación de los recursos naturales.
En segundo lugar, existía una gran descompensación social; por una parte estaba una aristocracia muy limitada y ligada por lazos personales y de juramento de fidelidad, coexistiendo con una escasa clase artesanal que producía para las necesidades pero no era capaz para crear excedentes comerciales.
En tercer lugar: Un sistema económico cerrado que permanecía anclado, utilizando las antiguas vías comerciales romanas; no se construyeron nuevas calzadas quizás por que no contaban con los buenos ingenieros de los tiempos de los romanos.
Y en un cuarto lugar, el sistema económico era muy estrecho reduciéndose a un mero intercambio de productos artesanales de la ciudad por los del campo. Aunque ya hay constancia de que se celebran ferias comerciales en días señalados por el calendario religiosos, todavía no llegarán al auge de los siglos posteriores y que alcanzarán gran apogeo a parte de las grandes rutas de la sal. Especialmente famosas eran la de la Champagne.
Los recursos técnicos eran deficientes hay una regresión técnica con respecto a Roma. Se nota incluso por el aprovechamiento de las muchas estatuas y columnas que a veces son transportadas desde lugares lejanos, para la construcción de iglesias y palacios lo que nos hace automáticamente pensar que no poseían artesanos suficientemente especializados que conocieran estas técnicas.
Luego hay un factor nada despreciable a destacar y es que el Imperio, con sus defectos y virtudes, se sustentaba en la idea de un fin o sentido colectivo; el engrandecimiento de la Ciudad de Roma y su expansión imperial. En contraposición, los francos, así como todos estos pueblos que iban surgiendo con aspiraciones de ocupar el hueco dejado por Roma, carecían del sentido de estado y, su engrandecimiento era más bien una cuestión personal. Carlomagno como todos estos reyes tenía un sentido patrimonial del estado, eran gentes que provenían de clanes familiares con una fuerte sentido de pertenencia tribal muy acusado, faltándoles el sentido jurídico global abstracto de estado o nación más moderno.
Por el contrario el princeps romano era el jefe político y religioso del Imperio. Incluso en tiempos de dificultades al emperador se le otorgaba un poder extraordinario y se le divinizaba. Pero la gran diferencia con el Imperio Carolingio es que esta unidad terrenal y divina se rompe en el momento en que se extiende el cristianismo por Europa y el Papa es el vicario de Cristo en la tierra; en contraposición el Emperador pasa a ser el defensor de esta comunidad cristiana y en muchas ocasiones también el defensor del Papa al no poseer éste ejércitos. Pero sus funciones se diferenciaban claramente.
Esta tensión entre poderes oscilará constantemente. Así en tiempos en que el Imperio se mantenía cohesionado el predominio era del poder imperial, pero en momentos de fraccionamiento del poder y flaqueza imperial, sería el Papado el árbitro de los conflictos en una sociedad en la que el poder se encuentra atomizado por un feudalismo creciente que iba tomando cuerpo al adquirir poder estos funcionarios reales, Duques y Comes que si bien su función primordial era la de meros emisarios delegados reales, ahora ante esta descomposición del poder tratarán por todos los medios de ejercer su autonomía en los territorios confiados a su tutela.
Entre los bárbaros no hay una política decisoria en cuanto a la sucesión al trono; como ya se ha explicado anteriormente, esa sucesión era electiva lo que implicaba que surgieran facciones, luchas e intrigas y desde luego no sobraban los sobornos para la compra de voluntades o para conseguir apoyos a la hora de acceder al poder real; digamos que hasta Carlos V, que deja a su hermano Fernando como emperador de la zona oriental, no cesan estas incertidumbres, quedando de esta manera vinculado el Imperio a la casa de los Austria durante siglos.
Apuntábamos arriba la atomización del poder, que daba lugar a la creciente feudalización; esto se hacía posible porque los príncipes, condes y duques, veían en el emperador un poder lejano, haciéndoseles atractiva el aprovechamiento de esta lejanía para sus intereses y más cuando la personalidad de éste no era tan fuerte como la de Carlomagno. Así que era una tentación demasiado difícil de rechazar el hacerse los remisos y remolones a la hora de transferir las rentas obtenidas de los campesinos por el uso de las tierras que trabajaban en usufructo y pertenecientes a la Corona que habían sido otorgadas como compensación a favores y apoyos recibidos tanto en la guerra como en la paz por los reyes. Como ya lo hemos viendo, en el transcurrir de los tiempos, las tierras con sus rentas así como los cargos de estos funcionarios reales, los Condes y Marqueses u otros títulos, por la misma distancia real se fueron haciendo, al principio de hecho y luego de derecho, vitalicias y luego hereditarias, así que ya sólo quedaba un paso para que sucediera que al monarca no le quedasen más tierras que repartir ni más favores que otorgar a la aristocracia ambiciosa para atraerla a su favor. La consecuencia inevitable fue que al disminuir el poder del monarca de otorgar tierras o poderes, este pasase a ser un primus ínter pares.
También en esta época debido a la expansión demográfica de los pueblos periféricos, comienzan las invasiones normandas y la piratería berberisca. Estos últimos eran una auténtica plaga que asolaban el Mediterráneo;los normandos atacaban los pueblos costeros se llevaban todo botín que pillaban y luego se marchaban; no parecían interesados en establecerse. Se comentaba en los anales de los monasterios y conventos que estas gentes se lanzaban como posesos al combate con una furia ciega nunca antes vista. Su sola presencia atemorizaba a los campesinos. Se cree que su resistencia e indiferencia al dolor provenía del consumo de ciertos hongos o al consumo de centeno o cerveza contaminados por el cornezuelo del centeno, francamente los relatos son espeluznante, y no es de extrañar que estos atemorizados e indefensos pobladores costeros clamaran De furore normannorum libera nos Domine.
También en esta época debido a la expansión demográfica de los pueblos periféricos, comienzan las invasiones normandas y la piratería berberisca. Estos últimos eran una auténtica plaga que asolaban el Mediterráneo;los normandos atacaban los pueblos costeros se llevaban todo botín que pillaban y luego se marchaban; no parecían interesados en establecerse. Se comentaba en los anales de los monasterios y conventos que estas gentes se lanzaban como posesos al combate con una furia ciega nunca antes vista. Su sola presencia atemorizaba a los campesinos. Se cree que su resistencia e indiferencia al dolor provenía del consumo de ciertos hongos o al consumo de centeno o cerveza contaminados por el cornezuelo del centeno, francamente los relatos son espeluznante, y no es de extrañar que estos atemorizados e indefensos pobladores costeros clamaran De furore normannorum libera nos Domine.
El Imperio, dadas las condiciones de extensión y de falta de estructura política basada en lazos feudales, era, desde luego, inviable; sólo la figura fuerte y enérgica de Carlomagno podía mantener cohesionada políticamente estos extensos territorios.
No debe de extrañarnos que a su muerte, como era la costumbre, dividiera el territorio Imperial entre sus tres hijos Carlos, Pipino y Ludovico, pero otorgando a Ludovico el título imperial y la parte que le correspondía a ése que era la zona de Aquitania la dejó al mando de su sobrino Bernardo. Ludovico es coronado Imperator Augustus en un intento de unificar el imperio.
Desde el primer momento Ludovico puso orden en el ambiente relajado de la corte. Promulgó además el Ordenatio Imperii, una especie de constitución. A pesar de estos intentos el poder feudal se iba afianzando, en detrimento del poder real, cosa por otra parte que a los gobernados no parecía importarles demasiado ya que quizás preferían ser regidos por señores más próximos que en momentos de peligros les podían socorrer, o por lo menos les resultaba indiferente. Finalmente como veremos se producirá definitivamente la pérdida del trono, la zona de Alemania pasará a ser dominada por la casa de Sajonia, y Francia por la dinastía de los Capetos.
No debe de extrañarnos que a su muerte, como era la costumbre, dividiera el territorio Imperial entre sus tres hijos Carlos, Pipino y Ludovico, pero otorgando a Ludovico el título imperial y la parte que le correspondía a ése que era la zona de Aquitania la dejó al mando de su sobrino Bernardo. Ludovico es coronado Imperator Augustus en un intento de unificar el imperio.
Carlomagno corono a Ludovico Pio |
Como sus hermanos murieron, Pipino en el 810 y Carlos en el 811, Ludovico quedó como único emperador pero su reinado comenzó ya con la rebelión de su sobrino Bernardo que trató de quitarse el yugo de su poder en la Aquitania e independizarse pero fue finalmente condenado a muerte.Conmutándosele la pena se le mandó cegar pero murió.
Como era la costumbre Ludovico pretendió incorporar al trono sus hijos Lotario, Pipino y Luis el Germánico bajo la supremacía de Lotario.
Ludovico contrajo nuevo matrimonio con Judith una princesa bávara y al hijo de ambos, Carlos el Calvo su padre le hizo entrega de Suabia y Alsacia. Esto hace que Lotario se levante en armas y le derrote a su padre haciéndole a su madrastra y esposa de Ludovico, Judit retirarse a un convento.
Vistos todos estos desórdenes Pipino y Luis el Piadoso tienen que hacer en el año 883, en la basílica de San Medardo la penitencia de Soissons ante Lotario, sus Grandes y los obispos francos guiados por el obispo Ebbon de Reims. Reconociendo sus errores el rey depuso públicamente las armas y se revistió con el hábito de penitente. Lotario a partir de la penitencia de Soissons se hace con mucho poder y entonces temiendo la supremacía de Lotario, Pipino y Luis el Germánico liberan a su padre y derrotan a Lotario que se refugia en Italia y pierde el título Imperial.
Lotario |
Luis el Germánico |
Judith de Baviera |
Carlos el Calvo |
Ludovico persiste en dejar parte de su herencia a Carlos el Calvo, así que Pipino y Luis por el tratado de Worm del año 839 se reparten los territorios. Pero Ludovico fallece en el 840 así que finalmente por el Tratado de Verdún del año 843 se ponen todos de acuerdo en la herencia de Ludovico Pío.Esto implica un periodo de cierta paz.
Carlos el Calvo obtuvo el reino occidental desde el mar hasta el Ródano, para Luis el Germánico las regiones orientales y por su parte Lotario, la parte central del imperio, en una estrecha franja que abarcaba Roma y Aquisgrán (Aix le Chapelle en francés). Esto creó la semilla de lo serían la futura nación de Francia, el resto la Lotaringia, que abarcaba Flandes, Alsacia, Lorena y la Italia septentrional no prosperaría como nación y acabaría desintegrándose.
Tratado de Verdún |
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